Los productos del papel, y las bobinas en particular, son uno de los principales grupos de carga que requieren de implementos especializados en las carretillas elevadoras. Las bobinas de papel son pesadas, propensas al deterioro, difíciles de manipular y de un considerable valor de costo. La cadena de transporte de las bobinas es normalmente larga, requiere de unas 16 fases de manipulación antes de que la bobina de papel esté en la máquina de impresión. Esto hace que sea esencial el uso del mejor equipo y el que esté en optimas condiciones.
Todas las bobinas de papel no son iguales, tampoco las herramientas para manipularlas.
Las bobinas de papel se comercializan en una gran variedad de diámetros, alturas y pesos. Dependiendo de la variedad de procesos de impresión y calidad del papel se establecen diferentes requisitos para las características físicas de las bobinas de papel.
Hay diferentes maneras para manipular las mismas bobinas de papel.
Las exigencias de la cadena de logística desde la fábrica de papel hasta llegar al cliente final definen el equipo mejor y más apropiado. Todos los eslabones de la cadena de logística deben usar las herramientas más apropiadas y rentables. Las operaciones de gran volumen del estibador demandan diferentes carretillas elevadoras y accesorios que en el almacén de impresión.
No todas las bobinas de papel toleran la misma manipulación.
Las diferentes calidades de papel admiten distintas fuerzas de apriete. El apriete excesivo causa deformaciones a la bobina, incluso con posible deformación del núcleo central.
Apretar con una fuerza inferior puede ocasionar que la bobina de papel se deslice, caiga ó produzca efecto telescopio. Los papeles más delicados se deforman en los puntos coincidentes con las placas de contacto. Los papeles más resistentes toleran mejor la fuerza de apriete hasta su deformación. El exceso de fibra reciclada en la composición del papel, puede hacerla más propensa para las deformaciones.
El bobinado incorrecto excesivamente suelto, puede cambiar incluso el comportamiento de la bobina de papel bajo el apriete. Las bobinas de papel pueden deteriorarse por exceso ó insuficiencia en la fuerza de apriete.
No todas las bobinas de papel tienen la misma cubierta.
Una envoltura protege la preciada bobina de posibles daños, suciedad ó humedad. También evita que se desenrolle. Las bobinas de papel se envían con varios tipos de envoltura y a veces incluso sin ellas.
Las envolturas más comunes se fabrican de papel de kraft. Otros tipos de envoltura de papel y también de plástico se usan normalmente. Una envoltura típica consiste en las últimas capas ó restos de bobina, todas enrolladas alrededor de la bobina de papel y encoladas finalmente. Durante la manipulación las bobinas de papel se transportan con la fuerza de fricción generada entre la envoltura y las placas de contacto de la pinza.
Las propiedades de manipulación de la envoltura son de vital importancia:
Las pinzas para fardos de pasta normalmente se diseñan para cargar de 1 a 8 paquetes de fardos de pasta a la vez. Algunas veces las mismas pinzas, se utilizan también para manipular balas individuales y conjuntos de balas que no se encuentran unidas o apiladas.
Cuando se selecciona el accesorio para manipular fardos de pasta de papel, debe prestarse especial atención en cómo y con que combinación de unidades deberá ser manipulada la carga. Tener en cuenta que la pinza debería poder manipular la carga desde todas las direcciones. La capacidad tanto de la pinza como de la carretilla será distinta en función del sentido de toma de la carga a manipular.
Dependiendo de las necesidades del sistema de transporte, las mismas unidades de bala pueden transportarse utilizando diferentes modelos de accesorios. Por ejemplo, la misma unidad de carga de 4 puede transportarse de frente, como 2+2 combinándolas a lo largo o como 2+2 una encima de la otra. Los requisitos fijados para los accesorios en cada caso son completamente diferentes.